domingo, 29 de mayo de 2011

DECÁLOGO PARA LA REFUNDACIÓN DEL CAPITALISMO

La primavera ha vuelto y con ella y en la actual tesitura vital en que me encuentro, he decidido recuperar este blog, que creía perdido. Ha vuelto de la mano de cuatro hippies y miles de ciudadanos. Y vuelve con algo que escribí en diciembre de 2008.


El resumen ejecutivo hace furor en el mundo en que vivimos. Los decisores precisan la información esquemática, ordenada, nítida: ya la desarrollarán ellos en sus cabezas, que para eso son los jefes. Llevado por esta idea, he decidido elaborar, con pretensiones de permanencia y con el ánimo de pasar a la Historia, un decálogo de la nueva economía, la del postneocon, aquella en la que como dijo Sarcko, vamos a refundar las bases del capitalismo.


DECÁLOGO DE LA NUEVA ECONOMÍA.

1. Los bancos ingresan todo el dinero, incluido el público.

2. Los bancos no prestan. El dinero que ingresan conforme al punto primero sólo debe utilizarse para sanear sus cuentas y equilibrar sus balances.

3. El crédito es para los que no lo necesitan.

4. Las empresas, ante una situación de bonanza, deben gastar sus beneficios. Preferiblemente en gastos de representación, reparto de dividendos, stock options y rentings. En ningún caso se debe invertir en cualificación de sus trabajadores, investigación, innovación, apertura de nuevos mercados o diversificación de la actividad. Si la empresa se dedica a la promoción inmobiliaria, se recomienda también a los gestores pagar 400 euros + comisiones a sus comerciales y adquirir un vehículo de no menos de cien mil euros.

5. Las empresas, ante una situación de crisis, deben reducir sus costes. Se recomienda hacer ERE's a son y sin tron, no pagar a nadie o posponer pagos a 90 días como el Corte Inglés y, a ser posible, descapitalizarse. Claro que de estas acciones, alguna responsabilidad tendrá el punto 2. Los bancos, cuando hay crisis, no te negocian "el papel".

6. Las Administraciones Públicas, ante una situación de bonanza, deben hacer la vista gorda ante las tropelías de cuatro o cuatro millones de hijosdeputa.

7. Las Administraciones públicas, ante una situación de crisis, deben repartir el dinero de todos. Por este orden: primero a los bancos, después a las Administraciones Públicas que les sean inferiores en rango, en tercer lugar a las empresas y por último a las inversiones (o sea, a los bancos y a las empresas). Los ciudadanos, que se jodan y paguen.

8. Cuanto más baje el precio oficial del dinero, mayores deben ser los tipos que apliquen los bancos para prestar dinero.

9. La inversión en vivienda no es un activo, es un pasivo.

10. Las cagadas deben trasladarse a “la economía real”. En la irreal ya hay suficientes personas y su número no debe ampliarse (si se hiciese, Ferrari dejaría de ser una marca exclusiva).

Antes de firmar, lea. Y pase lo que pase recuerde: usted, ciudadano de a pie, será el que lo pague.

Que viva la tontocracia.